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Sissí, la vida sobre ruedas. (Por Gaby Pessotano)

El miércoles 27 de enero vino a casa un amigo , para contarme que se había encontrado , en la ruta entre Tapalqué-Alvear, con una chica que venía recorriendo Latinoamérica en bicicleta. En noviembre había salido desde Ushuaia , y pensaba llegar a Colombia. Que era muy simpática, conversadora,que se llamaba Sissí, y que esa noche se quedaría en Saladillo. Tal vez, los 12 kilómetros desde el cruce le hicieron desistir de entrar a nuestro pueblo.

“Pero…¿No la invitaste a comer un asado? ¡Qué bueno hubiese sido hacerle una nota, para que nos cuente sobre su viaje!”
Pero el deseo sólo se quedó en la idea.

Casualmente (¿o causalmente?),el jueves 28 tuve que viajar a Buenos Aires. Nunca presto demasiada atención a lo que sucede en el camino, muy segura de mi experto chofer, y ocupada en cebar mate … Por eso, no sé cómo me percaté, pasando Roque Pérez, de una muchacha en bicicleta por la banquina de la Ruta 205.

“¡Allá va Sissí!” – grité. Detuvimos el auto en la banquina y me bajé con la cámara de fotos, para esperarla. Cuando se iba acercando , pedaleando sin pausa y sin prisa, le hice señas con la mano. Ella se sonrió, sorprendida. Paró su bici, siempre sonriente y amable. Cuando se quitó las gafas, le resaltaron sus hermosos ojos vivaces y celestes como el cielo.Había hecho noche cerca de Saladillo.
En una rápida charla al costado de la ruta, entre los ruidos de los vehículos que pasaban, ésto me contó en perfecto castellano:

“Soy periodista, de Finlandia .Quería conocer Sudamérica, y Argentina habla mucho de Sudamérica. Y mejorar el Español. Además, vine porque me gusta el paisaje.

Aunque viajo sola, normalmente no tengo miedo. Hay veces que tengo un poco más de cuidado. Tenía dos opciones: o no ir o ir sola, porque nadie quería acompañarme.
Ahora voy hasta Cañuelas, y mañana no sé si tomo el tren para entrar a Buenos Aires , no sé si voy hasta Ezeiza en bici… todos me han dicho que es complicado entrar.
Argentina me gusta mucho. “

Un diálogo corto, pero lindísimo. Recordé lo del asado en Alvear:

-Mi amigo estuvo “flojo”, no te invitó a comer un asadito en General Alvear…

-Mejor- respondió- porque soy vegetariana.
Antes de reiniciar su viaje rodante, le saqué una foto. Y así partió, para seguir haciendo camino.

Sissí, ¡ ojalá puedas desentrañar los misterios del alma de esta América latina de venas abiertas! Es raro encontrar personas que hacen lo que realmente quieren hacer en la Vida. Vos sos una de ellas.

“Voy abriendo caminos para encontrarte
en este mundo perdido
también hay buenos amigos.

Y me llevaré
las buenas luces que tiene la gente
y cuando me sienta solo
me cuidarán para siempre.”
(Juan Luis Guerra)

Gaby Pessotano.
29 de enero 2016.