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Un niño de corta edad fue víctima de un “apriete” mediante la red social whatsapp.

Hubo denuncia policial.

El lamentable episodio ocurrió en la tarde del martes cuando, según fue informado este medio, el niño recibió un mensaje de un número        desconocido que no tenía agendado.

En una seguidilla de mensajes este individuo indagó al niño sobre              nombre de sus padres y domicilio. También lo amenazó de matar a su          familia enviándole fotos de armas y hasta un perro muerto. Ante la falta            de respuestas las amenazas fueron creciendo. “Hola amigo” fue el primer mensaje recibido y en su inocencia el niño respondió. Luego paso lo              antes descripto.

Un familiar del niño escuchó la llegada en cadencia de los mensajes y            notó nerviosismo en el pequeño. Al tomar el celular se encontró con las amenazas. Ante tal situación se comunica con los padres del niño que       estaban de viaje y se resolvió hacer la denuncia policial.

Más allá de la tarea de la justicia de tratar de dar con el responsable de          este hecho y ante el mal momento vivido por el niño, este tipo de          situaciones no se deben dejar pasar. Con la difusión de este episodio se        trata de alertar a los mayores para que tengan un mayor control sobre              los celulares de sus hijos menores, que como en este caso, quedan        expuestos a situaciones que por su corta edad no saben manejar.

Se puede tratar de una broma pesada. Si. Pero también puede ser el        comienzo de un hecho delictivo a futuro con los datos que la victima          pueda aportar aprovechándose de su inocencia.