Dirigentes del arco político repudiaron el accionar del fiscal Fernando Rivarola, quien alivió el pedido de penas para los autores de una        violación en manada, al considerarla un “desahogo sexual”.
Según el relato de la propia víctima, un grupo de seis jóvenes abusó sexualmente de ella en una fiesta en la zona de Playa Unión (Chubut),          en 2012, cuando tenía 16 años. La denuncia recién la pudo realizar en      enero del año pasado, debido a las amenazas y el hostigamiento al              que fue sometida luego del hecho.
“A partir de ese momento empezaron sus intentos de acallarme, tanto            a mí como a mis amistades”, había manifestado la joven, quien tuvo            que irse a otra ciudad “como si hubiera sido responsable de la          situación”. En el medio, entre la violación y la denuncia, hubo un            intento de suicidio por parte de la víctima, que finalmente en 2019 logró judicializar el caso tras recibir asistencia psicológica y psiquiátrica.