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 Desde el INCUCAI desarticularon la    propuesta de Javier Milei sobre la      posibilidad de comercializar órganos.

La prohibición de comercializar órganos lo que logra es generar “equidad en el acceso al trasplante” para los pacientes que lo requieran definiendo la prioridad en base a “criterios únicos establecidos por normas nacionales elaboradas por comisiones técnicas con amplio consenso”, señalaron

El Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI) respondió a los dichos de Javier Milei quien se manifestó a          favor de la venta de órganos y la calificó como "un mercado más".

En esa línea, el economista sostuvo que no todo tiene que estar regulado        por el Estado, pero desde el organismo encargado de coordinar la          donación y trasplante de órganos, tejidos y células emitieron un          comunicado en el que detallaron la ley de Trasplante vigente que          desarticula toda su argumentación.

En primer lugar explicaron que en Argentina “solo está permitida la        donación de órganos en vida para los mayores de 18 años en caso de    parientes consanguíneos o por adopción hasta el cuarto grado,              cónyuges, o personas que mantengan una unión convivencial”. Esta        medida es la que “garantiza que no exista comercio ni ningún tipo de contraprestación por la donación de órganos”, sostuvieron desde el    organismo perteneciente a la cartera de Salud nacional.

La prohibición de comercializar órganos lo que logra es generar “equidad        en el acceso al trasplante” para los pacientes que lo requieran definiendo          la prioridad en base a “criterios únicos establecidos por normas          nacionales elaboradas por comisiones técnicas con amplio consenso”, argumentaron.

Además la prohibición de mercantilización de órganos, no solo ampara a quienes deben recibirlos por cuestiones de salud sino que también          garantiza los derechos de aquellos que por vulnerabilidad económica se        vean en la necesidad de comercializar su cuerpo.

En ese sentido aclararon que vender un órgano propio no se basa en              una decisión individual tomada libremente sino que se hace por          necesidades económicas por lo que la persona actuaria bajo “coacción              y no puede considerarse autónoma”.

Por último, desde el INCUCAI llamaron a "condenar fuertemente" los            dichos de Milei que basados “en la supuesta defensa de la autonomía                no vislumbran las potenciales y peligrosas consecuencias para la      ciudadanía”.